“Es el derecho a tener acceso, de manera regular, permanente y libre, sea directamente, sea mediante compra en dinero, a una alimentación adecuada y suficiente, que corresponda a las tradiciones culturales de la población a que pertenece el consumidor y que garantice una vida psíquica y física, individual y colectiva libre de angustias, satisfactoria y digna.

Se invoca este derecho para que cualquier persona, familia en un barrio, vereda, municipio o departamento pueda acudir por la vía legal y organizativa para:

• Exigirlo.

• Vigilar que se cumpla.

• Y para construir propuestas de producción y distribución de alimentos que garanticen este derecho.

Si hacemos un análisis podemos observar que en los artículos relacionados con el derecho a la alimentación y en las leyes que lo cobijan se habla de la “Soberanía alimentaria” sin mencionarla, pero en vía de que esto no se cumple diversas organizaciones de base, esto es campesinos y campesinas que trabajan de manera conjunta para hacer valer sus derechos como comunidad, han dado definición a un concepto para reclamar sus derechos, ese concepto es la Soberanía alimentaria y la definición exacta que le han dado es:

“El derecho de los pueblos a definir su propia alimentación y su agricultura, a proteger y regular la producción y el mercado nacional de los productos agrícolas con el objeto de conseguir los objetivos de desarrollo sostenible, a determinar el grado de autosuficiencia y a limitar el “dumping” de productos alimenticios a sus mercados nacionales”.

Para aclarar; el Dumping es vender nuestros productos a precios que están por debajo del costo, mejor dicho, con el dinero que recibimos por nuestros productos no alcanzamos a cubrir los gastos de ese producto y la única forma de sacar uno nuevo es pidiendo prestado a personas o entidades y continua el ciclo, a saber estaríamos vendiendo a perdida.

Retomando sobre la definición que organizaciones de base han dado a de la Soberanía Alimentaria, esta tiene un enfoque político, es decir de convicción y voluntad de los gobiernos para proteger del hambre a su población, tomando medidas de protección de su producción agroalimentaria y garantizando su adecuada distribución a toda la población. La soberanía privilegia la producción interna para el autoconsumo de su población, antes que venderla o traer alimentos (importar) de otros países.