Todos en nuestra cotidianidad podemos realizar acciones sencillas pero muy significativas para la protección del agua en nuestras comunidades:
- Evitemos arrojar desechos orgánicos, basura de todo tipo y sustancias químicas a las quebradas y a campo abierto. Promovamos los cultivos agroecológicos, libres de sustancias químicas.
- Las quemas ocasionan la destrucción del páramo.
- Reforestemos, sembrando nuevos árboles en los alrededores de las fuentes de agua en lugar de remover la vegetación de las orillas.
- Instalemos, utilicemos y demos un uso y mantenimiento adecuados al pozo séptico. De este modo, evitaremos que las aguas residuales y domésticas vayan directamente a las fuentes de agua, o a campo abierto.
- Evitemos las talas de árboles.
- Mantengamos las coberturas vegetales que minimizan el riesgo de deslizamientos y avalanchas.
- Sembremos plantas nativas.
- Trabajemos con nuestros vecinos por la adopción de buenas prácticas ambientales.
- Hagamos un uso adecuado del suelo, evitando cultivar y construir en las cabeceras de los nacimientos y en las zonas de preservación indicadas en el Plan de Manejo Ambiental de Corantioquia.
- Mantengamos alejado el ganado de los nacimientos y cursos de agua.
- Llamemos la autoridad ambiental, ante algún tipo de contaminación que se genere.
- Implementemos prácticas de uso eficiente del agua, sin desperdiciarla.